El trabajo de investigación realizado en la tesis ‘Comunicación de la ciencia 2.0 en España: el papel de los centros de investigación y de las ediciones digitales de los periódicos de mayor audiencia’ ha tenido como objetivo acercarse a la realidad actual de la comunicación pública de la ciencia a través de Internet y de la Web 2.0, centrándose en dos actores principalmente, los centros públicos de investigación (universidades públicas y Consejo Superior de Investigaciones Científicas) y las ediciones digitales de los cuatro periódicos españoles de mayor audiencia, El País, El Mundo, ABC y 20 minutos (Comscore, 2012).
El periodo de estudio comprendió tres meses de diferentes años, del 1 al 31 de diciembre de 2012, 2013 y 2014, para poder determinar la tendencia de futuro en la comunicación de la ciencia 2.0.
Los resultados obtenidos, tanto en lo que se refiere al uso de las herramientas de la Web 2.0, como a la cobertura de la información científica en los medios digitales, dibujaron un panorama no muy positivo para la comunicación pública de la ciencia en España. Aunque las universidades públicas y los centros de investigación comenzaban a utilizar la potencialidad de Internet para “conversar” con los ciudadanos, ese diálogo no estaba siendo excesivamente fructífero ni en términos de interacción, por la baja conectividad que presentaban los perfiles en las redes sociales, ni en cuanto a difusión de resultados científicos, ya que conformaban una mínima parte de los contenidos publicados.
La evolución hacia el uso de estas herramientas era de crecimiento, pero la efectividad de la comunicación que desarrollaban se mantuvo en niveles bajos a pesar del paso de los años.
En lo que se refiere al tratamiento de la información científica en las ediciones digitales de los medios de comunicación la situación reflejada por los datos no fue más favorable. Los resultados obtenidos concluyeron que las ediciones online, más allá de superar los hándicaps de homogeneización y selectividad presentes en la cobertura en la prensa escrita, lo acentuaron.
No solo por la prevalencia de unas áreas sobre las demás, sino también por el protagonismo de dos revistas en los tres años analizados, Nature y PNAS. En torno al 40% de las noticias hacían referencia a una revista de alto impacto como fuente y, de ese 40%, estas dos revistas son las que mantuvieron una presencia mayor hasta 2014, cuando también se sumó Science entre las más relevantes. Nature constituyó una de las fuentes más recurrentes en las ediciones digitales al igual que lo era en las versiones impresas de los periódicos.
La selectividad también fue un resultado contrastado en este estudio. E incluso podemos seguir hablando de “medicalización de la información” ya que la biología y la biomedicina fueron el área con mayor protagonismo los años 2012 y 2014. A esa “medicalización” le añadimos una “astronomización” de la información, si es que este término pudiera ser admitido, ya que esta disciplina ocupó un lugar prevalente en las noticias científicas españolas, llegando a ser el área protagonista en el año 2013. La fuerte presencia de la NASA como fuente informativa puede explicar esta relevancia que la información sobre astronomía está adquiriendo en los medios españoles.
Otra de las conclusiones destacables es que los trabajos científicos realizados por investigadores españoles perdieron protagonismo en las ediciones digitales de los periódicos españoles frente a los desarrollados por centros o instituciones internacionales. Solo en torno a un tercio de las noticias científicas publicadas en medios de comunicación españoles hicieron referencia a una fuente de ámbito nacional. En cuanto a la tendencia a la “americanización” de la información científica, que ya apuntaban estudios anteriores en prensa escrita, se mantuvo también en las ediciones digitales de los periódicos españoles. En los años 2013 y 2014, más de una tercera parte de las noticias mencionaron a una institución científica americana. Estos resultados apuntaron a una dependencia de estos medios de las agencias de información y de los departamentos de comunicación de importantes centros de investigación internacionales, la mayoría de ellos localizados en Norteamérica.
Así, sirva este tesis doctoral como una reflexión de la necesidad existente en España de generar trabajos de investigación en el ámbito de la comunicación pública de la ciencia que aborden desde la conceptualización de la disciplina, hasta la evaluación de las actividades que ya se están desarrollando para acercar la ciencia a todos los públicos.